Recientemente, los datos económicos de EE. UU. han mostrado un rendimiento deficiente, con varios indicadores que indican una falta de impulso en el crecimiento económico. El mercado laboral está débil, con solo 73,000 nuevos empleos en julio, muy por debajo de la expectativa de 110,000. Más preocupante es que los datos de empleo de los dos meses anteriores fueron revisados a la baja en 258,000, la mayor corrección en 5 años. La tasa de desempleo ha aumentado al 4.2%, y la situación de empleo para los jóvenes es cada vez más grave.
El mercado de consumo tampoco es optimista. En julio, las ventas minoristas crecieron un 0.5% en comparación con el mes anterior, pero al excluir automóviles y gasolina, el aumento real fue de solo el 0.2%. El índice de confianza del consumidor cayó a 58.6, un nuevo mínimo del año, lo que refleja la preocupación de la población sobre las perspectivas económicas. Al mismo tiempo, las expectativas de inflación aumentaron al 4.9%, lo que inhibió aún más la voluntad de consumo.
El sector manufacturero tampoco ha escapado. El índice de clima empresarial en manufactura ha caído a 48, por debajo de la línea de 50 que separa la expansión de la contracción, lo que indica que la industria ha entrado en recesión. La disposición a invertir por parte de las empresas se ha debilitado y las actividades de producción se han desacelerado.
Frente a estos desafíos económicos, la postura política de la Reserva Federal ha cambiado claramente. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, reconoció en un discurso del 22 de agosto que ha aumentado el riesgo de una desaceleración en el mercado laboral y afirmó que abandonará el 'objetivo de inflación promedio', optando por un enfoque de política más flexible. Esta declaración fue interpretada por el mercado como una señal de recortes de tasas, y la probabilidad de un recorte en septiembre aumentó abruptamente del 40% al 91%.
El posible cambio en la política de la Reserva Federal no solo afecta a los mercados financieros tradicionales, sino que también podría tener un profundo impacto en el mercado de criptomonedas. Un entorno de bajas tasas de interés suele llevar a los inversores a buscar activos de alto rendimiento, lo que podría aumentar el interés en inversiones en criptomonedas como Bitcoin. Sin embargo, la debilidad económica también podría desencadenar un sentimiento de aversión al riesgo, afectando el rendimiento de los activos de alto riesgo.
En general, la economía estadounidense enfrenta múltiples desafíos, y los ajustes en la política de la Reserva Federal están a la vuelta de la esquina. Vale la pena seguir y analizar en profundidad cómo esta serie de cambios afectará a la economía global y a los diferentes mercados de activos.
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governance_ghost
· hace10h
Simplemente compra BTC.
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ProposalDetective
· hace10h
Esta reducción de tasas de interés es la oportunidad para BTC.
Recientemente, los datos económicos de EE. UU. han mostrado un rendimiento deficiente, con varios indicadores que indican una falta de impulso en el crecimiento económico. El mercado laboral está débil, con solo 73,000 nuevos empleos en julio, muy por debajo de la expectativa de 110,000. Más preocupante es que los datos de empleo de los dos meses anteriores fueron revisados a la baja en 258,000, la mayor corrección en 5 años. La tasa de desempleo ha aumentado al 4.2%, y la situación de empleo para los jóvenes es cada vez más grave.
El mercado de consumo tampoco es optimista. En julio, las ventas minoristas crecieron un 0.5% en comparación con el mes anterior, pero al excluir automóviles y gasolina, el aumento real fue de solo el 0.2%. El índice de confianza del consumidor cayó a 58.6, un nuevo mínimo del año, lo que refleja la preocupación de la población sobre las perspectivas económicas. Al mismo tiempo, las expectativas de inflación aumentaron al 4.9%, lo que inhibió aún más la voluntad de consumo.
El sector manufacturero tampoco ha escapado. El índice de clima empresarial en manufactura ha caído a 48, por debajo de la línea de 50 que separa la expansión de la contracción, lo que indica que la industria ha entrado en recesión. La disposición a invertir por parte de las empresas se ha debilitado y las actividades de producción se han desacelerado.
Frente a estos desafíos económicos, la postura política de la Reserva Federal ha cambiado claramente. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, reconoció en un discurso del 22 de agosto que ha aumentado el riesgo de una desaceleración en el mercado laboral y afirmó que abandonará el 'objetivo de inflación promedio', optando por un enfoque de política más flexible. Esta declaración fue interpretada por el mercado como una señal de recortes de tasas, y la probabilidad de un recorte en septiembre aumentó abruptamente del 40% al 91%.
El posible cambio en la política de la Reserva Federal no solo afecta a los mercados financieros tradicionales, sino que también podría tener un profundo impacto en el mercado de criptomonedas. Un entorno de bajas tasas de interés suele llevar a los inversores a buscar activos de alto rendimiento, lo que podría aumentar el interés en inversiones en criptomonedas como Bitcoin. Sin embargo, la debilidad económica también podría desencadenar un sentimiento de aversión al riesgo, afectando el rendimiento de los activos de alto riesgo.
En general, la economía estadounidense enfrenta múltiples desafíos, y los ajustes en la política de la Reserva Federal están a la vuelta de la esquina. Vale la pena seguir y analizar en profundidad cómo esta serie de cambios afectará a la economía global y a los diferentes mercados de activos.